Nuestro héroe se llama así, porque alcanzó el éxito al realizar una hazaña impresionante, jugándose la vida por los demás, concretamente un niñó de 2 años.
Nació en el seno de una familia humilde de 4 hermanos, siendo el mayor de ellos, y respondía al nombre de Gabriel; siempre cuidaba de sus hermanos, protegiéndolos y ayudándolos a ellos y a sus padres que no disponían de demasidos recursos para sobrevivir; Pronto se dio cuenta de que había nacido para ser útil a los demás y quiso trabajar, desde siempre, de bombero, lo cual no le hizo gracia a sus padres porque es un trabajo muy arriesgado y de mucho valor, pero él estaba decidido.
Así, con todo el dolor de sus padres, se preparó a conciencia para trabajar de bombero, convirtiéndose en una persona excelente en su profesión: iba salvando vidas y vidas de las llamas, con valentía y sin ningún miedo, recibiendo el agradecimiento y el aliento de todos los que eran ayudados por él, hasta que llegó el día en que le avisaron de que había un incendio impresionante en un hotel de 10 plantas, con un montón de huéspedes alojados en él, y muy extendido; se trasladaron allí a todo gas, con la sirena a todo volumen y a toda velocidad. Fueron sacando a toda la gente, con muchas dificultades, pero con mucho valor y entereza, hasta que, cuando creían que todo el mundo estaba a salvo, oyeron el grito desesperado de una madre, diciendo que su hijo de 2 años se había quedado dentro.
El alboroto y desepero era total en aquellos momentos y Gabriel, junto con otro compañero, se arriesgó a entrar nuevamente al hotel, aún sabiendo que prácticamente estaba todo el edificio en llamas; la gente, fuera, rezaba y estaba a la expectativa por lo que pudiera pasar y la madre, desesperada, histérica, porque temía por la vida de su hijito. Finalmente salió Gabriel con el niño de 2 años, sano y salvo, y desde entonces lo consideran un gran héroe.
Nació en el seno de una familia humilde de 4 hermanos, siendo el mayor de ellos, y respondía al nombre de Gabriel; siempre cuidaba de sus hermanos, protegiéndolos y ayudándolos a ellos y a sus padres que no disponían de demasidos recursos para sobrevivir; Pronto se dio cuenta de que había nacido para ser útil a los demás y quiso trabajar, desde siempre, de bombero, lo cual no le hizo gracia a sus padres porque es un trabajo muy arriesgado y de mucho valor, pero él estaba decidido.
Así, con todo el dolor de sus padres, se preparó a conciencia para trabajar de bombero, convirtiéndose en una persona excelente en su profesión: iba salvando vidas y vidas de las llamas, con valentía y sin ningún miedo, recibiendo el agradecimiento y el aliento de todos los que eran ayudados por él, hasta que llegó el día en que le avisaron de que había un incendio impresionante en un hotel de 10 plantas, con un montón de huéspedes alojados en él, y muy extendido; se trasladaron allí a todo gas, con la sirena a todo volumen y a toda velocidad. Fueron sacando a toda la gente, con muchas dificultades, pero con mucho valor y entereza, hasta que, cuando creían que todo el mundo estaba a salvo, oyeron el grito desesperado de una madre, diciendo que su hijo de 2 años se había quedado dentro.
El alboroto y desepero era total en aquellos momentos y Gabriel, junto con otro compañero, se arriesgó a entrar nuevamente al hotel, aún sabiendo que prácticamente estaba todo el edificio en llamas; la gente, fuera, rezaba y estaba a la expectativa por lo que pudiera pasar y la madre, desesperada, histérica, porque temía por la vida de su hijito. Finalmente salió Gabriel con el niño de 2 años, sano y salvo, y desde entonces lo consideran un gran héroe.
Laura Ter 1º E.S.O.
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