Empezaba una nueva vida para él porque había superado su adicción a la droga, que duraba 10 años. Luis era un chico normal, buen estudiante, trabajador, que tuvo la desgracia de relacionarse con gente que le ofrecía droga y, como era débil de personalidad, se enganchó a ella. Pasaron días, meses y años, con el disgusto de sus padres, gastándose el poco dinero que tenía, perdiendo peso, despreocupándose de su aspecto físico: una auténtica pesadilla para él.
Un día conoció a una chica que le aconsejó, con mucho amor y comprensión, que fuera a un centro de desintoxicación, que ella le acompañaría personalmente a cada sesión y, así fue..
La chica logró que Luis dejara su adicción para siempre, gracias también a su fuerza de voluntad, y Luis prometió no volver a caer en la droga jamás y ayudar a los que todavía siguen enganchados. Por eso, Luis cerró la puerta y empezó una nueva vida sana y en buena compañía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario