Querida vecina:
Le escribo esta carta porque ya hace días que la estoy ojeando y me gustaría establecer contacto con usted. Ya sé, que así de golpe, a lo mejor no le interesa, pero tengo que decir que soy un tipo serio (cuando es preciso serlo) y simpático (cuando las tristezas y agobios no avecinan a mi intelecto).
He cargado de existencias el aparato que conserva los alimentos y me gustaría que lo vaciáramos juntos. ¿ Le va bien esta noche a las 21:30?. Creo que nos haremos muy amigos y lo pasaremos a lo grande. Por lo que he investigado de usted, me parece que es muy buena humana y que tiene un hijo, como hay que tenerlo.
Reciba un saludo del vecino admirador del 5º A.
Firmado:
Alfonso Ente Marciano.
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