Este cazador resultó ser un cobarde y un traidor. Dejó que Blancanieves se escondiera en el bosque y me mintió diciéndome que ya estaba muerta. Suerte tuve de mi fiel espejo mágico que, al preguntarle quién era la más bella del mundo, replicó:
-”No eres tú, mi ama, sino Blancanieves que vive en el bosque con los siete enanitos”.
Entoces fue cuando planee mi cruel venganza. Me disfracé de dulce anciana y regalé una manzana envenenada a Blancanieves.
-”¡Por fin lo he conseguido!”-Exclamé al ver a Blancanieves tendida en el suelo. -”Blancanieves está muerta. Ahora soy yo la más bella del mundo”- grité con gran alegría.
Al ir hacia el castillo me atacó un príncipe que había salvado a Blancanieves. Me hizo prometer que nunca más volvería a molestarla y me desterró de su reino.
Ellos se casaron y vivieron felices y a mí me tocó de nuevo ser la bruja mala de todos los cuentos.
Júlia Marín. 2º A 2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario